Y han pasado 30 años desde que Tom Hanks en el que fuera uno de los mejores papeles de su vida es una de esas películas a las que el paso del tiempo no les resta ni un ápice de carisma.
Ganadora de seis premios Oscar -incluido el de Mejor película-, Forrest Gump nos sigue despertando las mismas emociones tres décadas después a medida que acompañamos a su protagonista en su recorrido vital, que a su vez es un recorrido por la historia de los Estados Unidos de América. Por el camino, Forrest se cruza con una serie de personajes que no solo dejan huella en el personaje, sino que, en el corazón de los espectadores, son igual de míticos que el que interpretase Hanks.
Sin duda uno de ellos es el Teniente Dan, el oficial a cargo del pelotón al que pertenece Forrest durante su participación en la guerra de Vietnam y al que termina salvando contra su voluntad tras un ataque del bando enemigo. Al principio, el Teniente Dan, que ha perdido las dos piernas, se muestra enfadado con Forrest por no haberle dejado morir en el campo de batalla, pero luego se forja entre ellos un estrecho vínculo.
Sin embargo, hace cinco años, en 2019, que Gary Sinise tuvo que alejarse por completo de Hollywood por tristes motivos familiares.
Tal y como el propio Sinise ha compartido en una entrevista con People, el periodo más angustioso de su vida comenzó con un derrame cerebral de su padre seguido de un preocupante diagnóstico de cáncer de mama en etapa 3 para su esposa. Posteriormente llegaría el terrible enfermedad de su hijo Mac, que fue diagnosticado de cordoma, un cáncer de columna poco común y de crecimiento lento. "Fue un golpe doble", recuerda Sinise.
Después de ocho tratamientos de quimioterapia y 35 radioterapias, Moira logró superar el cáncer, pero el estado de Mac empeoró y acabó falleciendo el 5 de enero de 2024 a la edad de 33 años. "La forma en que lo afrontó fue pura gracia y valentía", asegura Gary a la publicación sobre el momento en que descubrieron el tumor de Mac tras meses de dolor inexplicable: "Parecía un monstruo agarrando la columna de mi hijo".
Desde 2020, Gary Sinise se ha dedicado en cuerpo y alma a cuidar de su familia y eso es lo que quiere seguir haciendo. Adora vivir rodeado de sus nietos y disfrutar de los suyos, al tiempo que honra la memoria de Mac, ha sido clave en la recuperación por la triste pérdida: "Poder quererlos y querer a nuestras hijas me ha ayudado mucho".
En 2020, Sinise dejó de actuar. Su hijo Mac estuvo hospitalizado durante seis de los primeros ocho meses del año y el actor estaba empeñado en buscar un milagro que no llegó. Cinco años más tarde, no está seguro de cuándo, o si ni siquiera volverá. "Puede que surja algo y esté bien, pero ahora es más difícil dejar el hogar. Solo quiero estar con mi familia. Desde que perdí a Mac, abrazo mucho más a mis hijas. Piensas en las cosas realmente importantes".
